lunes, 25 de mayo de 2009

Animos

Hay veces en que el significado de lealtad queda en entredicho con la realidad, dandose de golpes lo idealizado con las fauces de la verdad.
Poco queda, nada queda...
Hoy mas que nunca, animos!, hoy mas que nunca comenzar a creer en todas las opciones...


Huevos! Que el camino es largo...

Jubilo

Jubilo

Ese dia que parecia uno mas, en el que el sol al que le das la espalda se cuela furtivo por la ventana, exultando su luz y su presencia, a ti, a diario te da igual, no es esa luz la que estas buscando.
Sentando junto al cristal frente a una notebook prestada estan un cigarrillo nervioso consumiendose, una taza de cafe que sabe a crisis, y tus corroidas esperanzas.
Usuario. Impares martilleos al teclado. Stop. Password. Tac! Tacatac! Tac! Tac! Tactacta! Tac!.
Bebes de tu cafe con la mirada fija perdida en la pantalla con el humo invadiendo.
Tres correos nuevos. El corazon comienza a ponerse nervioso. Click!.

"Estimado ex-Recepcionista de noche, hemos recibido su cv y nos gustaria tener una entrevista con Usted, es Jueves, en La Ciudad que no me quiere.
Un cordial saludo, Esperanza Maybe.
RR. HH. Colorines Hoteles."

Vuelves a leer rapidamente. "Si!!!" gritas en una casa solitaria donde eres el unico presente al carecer de obligaciones. Caminas nervioso por toda la casa gritando euforico. Esto es lo que quieras, tiene el sabor de lo añorado, de lo que sabe a luz.
Freneticamente te sientas en el ordenador a buscar alojamiento en La Ciudad que no me quiere. Haces cuentas pero terminas rapido, la cuenta de tu banco esta a cero mueriendo famelica a los ultimos dias de mes. Habra que hacer de tripas corazon y pedir una mano.
Pasa la mañana y comienza a llegar gente a casa. Comentas glorioso la buena nueva, vuelves a tener esperanza, crees nuevamente en ti, tienes algo de luz.
A pesar de ello, recibes una respuesta fria. No importa, hay que centrarse, hay que preparar el ataque a La Ciudad que no me quiere.

Ya con la totalidad de la gente que habita contigo enterada de la buena nueva y encontrada la mano economica que financie este oportunidad. Compras los billetes a La Ciudad que no me quiere. Te tocara viajar mal e incomodo, llegar a la entrevista sin dormir y probablemente nervioso. Da igual, ya veras como solucionas y cometes un genocidio de nervios, tu sigues sonriendo por dentro.
Es noche no duermes apenas, te dedicas a limpiar tu traje, ese que te da confianza, ese que parte de los restos de los buenos dias.
El cansancio puede contigo , caes con todo listo y preparado para ir a atacar La Ciudad que no me quiere.